sábado, 27 de noviembre de 2010

Una marioneta. Hay dias que así me siento

Llueve sobre Xàtiva con "la Nit en blanc" en marcha. Dentro de un ratito de pondré el traje (me lo pongo en contadísimas ocasiones) para ir de bodas de plata y antes de concierto. Esta mañana he estado en el ensayo de la orquesta de la Primitiva. Todo OK pese a que ha dado la sensación de que esta tarde no saldrá bien.
He leído la prensa muy por encima esta mañana. Lo de Parra y los mensajes ha sido el asunto de los tres columnistas de Levante. Vuelve a salir el binomio Rus-Parra. Además se habla de intereses de medios de comunicación en uno u otro candidato tras la que se da como segura marcha de Camps (algun día será). Si se la "pegan " a Parra es como si se la pegaran a "Rus". Si tienen ocasión lean los artículos.
A mí siempre me da la sensación de ser un muñequito al que unos y otros mueven con hilos. Hilos que no distingo. Alguien (una mente pensante y muy lista) me saca las noticias que quiere para que yo piense lo que él quiere que piense, me elogian a unos y me hunden a otros para que, cuando me toque votar, vote a quien ellos quieren. De eso se hablaba mucho en la ciencia ficción, Recuerdo un cuento en el que, por lógica supongo, se dejaba la decisión de elegir un presidente en manos de un único elector porque ese elector, un "americano medio", había recibido todos los mensajes de unos y de otros durante la campaña. Quien mejor hubiera hecho su campaña ganaba, su voto resumía el éxito de la campaña, no hacía falta preguntar a nadie más. Era ciencia ficción pero esta semana me ha acordado de este cuento.
Me voy a la ducha, a afeitarme y a ponerme el traje. Mañana os cuento algunos detalles y algo de fútbol (hoy juega el Espanyol) y mi equipo de tenis de mesa está jugando su partido. Sigue lloviendo.

2 comentarios:

  1. Me encanta la sinceridad que destilas Félix. No dejes de escribir porque siempre hay alguien al otro lado, y las palabras en negro sobre blanco no se las lleva el viento tan rápido como las que se pronuncian ante un micrófono. Un abrazo de un ex-becario.

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    1. Muy cierto, no dejes de encender el micrófono , siempre hay y habrá gente que este dispuesta a escucharte.

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