Peor sería trabajar poniendo tejas.

Sigue apretando el calor. Tal vez un poco menos, pero aprieta. Me he sentado ante el ordenador y he mirado por la ventana. De inmediato he recibido consuelo porque, al menos, aunque con calor, escribo a la sombra, corre el aire. A unos metros de mí, sobre el nbuveo tendido del AVE, sin sombra, los operarios no paran de poner travesas. Me he acordado de Josep Miquel Calabuig. Ayer me lo encontré al salir de la emisora, minutos antes de las tres del mediodía (ya os podéis imaginar la temperatura). Le pregunté ¿cómo lo lleva? Él me contestó con su famosa sorna "bien, total ha sido una noche, siempre hay una noche o dos, ha llegado ahora pero peor seria estar trabajando poniendo tejas". Tiene razón. En Xàtiva siempre hay unos días en verano que no encuentras consuelo.
En política el Bloc y Morera han sido protagonistas. Han criticado el trato de favor dispensado al conservatorio de Xàtiva. Dificil papeleta para los grupos locales: si critican la subvencion, mal, porque significa decir no a una mayor subvención para Xàtiva; si no lo critican, también, porque en teoría todos somos iguales. Un lío. Y poco más, sigue estando el asunto muy parado.
Me ha gustado escuchar a los del Annarock. Menudo fiestón tienen para el fin de semana. En deportes repaso a la preferente: todos ilusionados. Nadie habla de ascensos, hablan de permanencia. Son cautos.
Y ahora me voy a la procesión del Cristo a Novetlé.