Dolorido,melancólico, cabreado, ilusionado

Con dolores musculares, cabreado y contento, melancólico e ilusionado. Me cabría algún adjetivo más para definir mi estado este domingo. Lo de melancólico viene por un vídeo que ha colgado Ricardo Ortega Sánchez sobre el derrumbe del campanario de Sant Agustín. Ya lo había visto pero volverlo a ver, además al lado de mi hija (que no sabía nada), o de mis familiares, nos ha hecho recordar el hecho y a quien no está ya entre nosotros. También ha colgado hoy un vídeo de la nevada que hubo en Xàtiva en 1983. Lo de ilusionado es por el partido de baloncesto que dentro de un rato espero ves cómodamente sentado en el sofá de mi casa. Lo de cabreado es por la derrota del Olímpic 2-1 ante el Sant Andreu. Lo he seguido a través de una emisora que me ha facilitado Álex Dobón y tras el gol en el minuto 1 he saltado con el gol de empate y esperaba al menos sacar el punto del empate pero cuando los narradores daban por bueno el empate ha llegado el segundo gol local. Vaya golpe. Me parece que el equipo sigue recibiendo demasiado castigo, que los rivales sacan mucho provecho a las oportunidades que crean. Mañana sabré más. Para rematar el día deportivo el Espanyol ha perdido 2-1 en Zaragoza con dos goles de Luís García.

Contento porque ayer hice un buen top en la Pobla de Vallbona. Disfruté. He cambiado de goma y eso significa un cambio de juego pero planté cara a jugadores de superior categoría y jóvenes. Si normalmente cuando entreno juego 8 partidas ayer jugué 17 y los años se notan. Contento porque esta mañana los hemos reunido un centenar de vecinos para subir a la Creueta (cuando pueda colgaré las fotos que he hecho). Es una ascensión pesada y una bajada también pesada pero vale la pena. Por ambos esfuerzos estoy "hecho polvo".

De camino me he enterado del empate del Llosa en casa, también del empate sin goles del Canals. Voy a cerrar ya el ordenador. Ahora toca sofá y baloncesto. Hasta mañana.